Taller de lana natural en el Museo del Traje

He descubierto otra actividad que me gusta...

Me apunté junto con Bea y Lara al taller de lana afieltrada que impartía La Gallina Rosa en el Día de tejer en público en el Museo del Traje

 

Me lo pasé como una niña pequeña con la lana...

 Todo hay que decirlo, lo pasé un poco mal; me picaban bastante las manos (yo y mi "alergia/sensibilidad/intolerancia" a la lana...) e intenté aguantarme el picor.

 

Por alguna razón me imaginaba acariciando a las ovejas, y trasquilando a las pobrecillas para luego yo hacer una mini oveja...

Cada uno eligió el color de las patas que quisiera, yo, para no variar... Lo elegí negro. Siempre me han hecho gracia las ovejas negras, me dan menos mal rollo que las blancas (algún día tendré que hablar sobre ese mal rollo con las ovejas con un especialista, no es normal).

Las ovejas es algo fácil de hacer, pero que aún así tiene su gracia, y te mantiene entretenido durante un tiempo. Además, que nuestro afán perfeccionista no podía dejar ni un pelillo suelto y no parábamos de pinchar con la aguja.

Intenté hacer un carnero, por eso de variar (además se lo vi a una chica que lo estaba haciendo con nosotros y me pareció gracioso). No quedó como me gustaría, pero es tan majo...

 

Las lanas de colores eran tan monas.... Me gustan mucho las cosas bonitas que estoy descubriendo cada día. Me parece increíble. 

Como sobraba tiempo, y sin haberlo pensado, Jara nos regaló otra actividad... !!Con las lanas de colores!! Algo fácil, rápido y bonito. ¡¡Una mariposa!!

 

¿A que es una monada!? No me digáis que no...

Estas pequeñas cosas, tan sencillas, te hacen sentir tan feliz contigo misma, que no sé cómo no se me ha ocurrido antes dedicarme a estas cosas, aunque sólo sea como afición. 

Comprendo que haya gente que se dedique profesionalmente a esto. Estar rodeado de esto, me parece tan cercano a lo que realmente somos que no entiendo como nos hemos podido alejar tanto de estas cosas tan buenas para cada persona. 

Todo el mundo tendría que tener una afición como esta. Crear figuras con lana de oveja natural, ganchillo, punto, madera... Lo que sea, es tan gratificante...

 

¡Decidme que no son una monada! Las haditas serían estupendas como colgante en la habitación de una niña...

Hay miles y miles y miles y miles de cosas que se podrían hacer con lana. 

Si, ya sé... Menudo descubrimiento... A estas alturas de nuestras vidas, yo descubro la lana ¡Vaya! ¡Un aplauso!

Pero qué queréis que os diga... Cada una tiene un tiempo para descubrir las cosas...

Sí aún no lo habéis probado, os animo a que lo hagáis. 

Yo me estoy curando de comprar todo aquello que descubro, una tiene un espacio vital en casa, y el mío ya está lleno de trapillo y telas, así que no puedo dar más de sí la habitación. 

Al llegar a casa, alguien se adueñó de la ovejita. 

 

La he tenido que esconder, por que se volvía loca y no creo que los pelos sueltos de la oveja sean muy buenos, bastante tiene con los suyos. 

Espero que os guste.