Como se puede comprobar a lo largo de todo este tiempo, es más que obvio que soy una loca de los washi-tape y cada vez voy teniendo más y más y más...
El problema, es que mi bolsillo no va muy acorde con mis ganas de tener más washi tapes; así que me las he tenido que ingeniar.
Si partimos de la definición original de washi-tape...
No es mas que la evolución de la originalmente denominada “cinta de carrocero”
Pues es normal que a mí se me ocurra usar la cinta de carrocero que tengo en casa. ¿O no?
Así que, aúno dos pasiones. Los washi-tapes y los sellos jajaja Así, todo en uno.
Seguro que esto no es algo que se me haya ocurrido a mí sola, de hecho, he visto a gente que lo dibuja a mano. Yo, como soy muy vaga y además una pésima dibujante, prefiero los sellos. Además, es más rápido jeje
Sólo tienes que estampar, estampar y estampar todo lo largo que quieras de la cinta.
Para el de leopardo, también puedes rellenar los "huequitos" de colores, pero yo preferí dejarlo así y opté por mezclar dos colores de tinta diferentes (azul y rosa) para que diera ese aspecto. Y me encantó el resultado, por cierto....
Para el de cebra debí usar un color más fuerte....
El de cebra aquí no se ve...
Como todo washi-tape que se precie...Tiene múltiples usos. Yo lo he usado para "colgar" una de mis fotos favoritas (hecha por mí, además) sin dañar la pared, ni estropear el brillo de la fotografía por si después quiero cambiarla de sitio.
Ahora tengo un número interminable de washi-tapes... Tantos, como sellos pueda llegar a hacer.
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